Los guardianes de las redes sociales

Las redes sociales forman parte de la vida de casi todo el mundo. La gente las utiliza para comunicarse entre sí, escribir mensajes, comentar publicaciones y compartir fotos. Por desgracia, las redes sociales también son aprovechadas por los ciberdelincuentes para difundir información controvertida y a menudo incendiaria. Las modernas tecnologías digitales están atrayendo la atención de narcotraficantes, terroristas, pedófilos y traficantes de seres humanos. Los creadores de redes sociales trabajan con diligencia para erradicar los contenidos potencialmente nocivos. Incluso han creado toda una industria que emplea a algunos de los verdaderos guardianes de Internet. Las plataformas en línea como el casino en línea 21point también se enfrentan a retos, ya que deben garantizar un entorno seguro para sus usuarios. Los esfuerzos de estos guardianes son cruciales para mantener la integridad de los espacios digitales. Trabajan incansablemente entre bastidores, a menudo sometidos a fuertes presiones, para proteger a los usuarios y crear una comunidad en línea más segura para todos. Conozcámoslos y comprendamos el importante papel que desempeñan.

Guardianes de Internet: ¿Quiénes son?

Hoy en día hay muchas redes sociales diferentes, y en cada una de ellas uno puede encontrarse con contenidos inapropiados, peligrosos e ilegales. Sólo en Facebook, los usuarios suben cada día más de 350 millones de fotos, varios millones de animaciones, vídeos y mensajes de texto. Y cada trozo de ese voluminoso contenido puede contener contenidos maliciosos que infrinjan las leyes.
Cuando aparecieron las redes sociales, los voluntarios asumieron el papel de proteger a los usuarios de los riesgos. Los moderadores examinaban la información en línea, la filtraban y eliminaban los contenidos inapropiados. Más tarde fueron sustituidos por defensores profesionales de Internet que supervisaban la red 24 horas al día, siete días a la semana.

Ha nacido una nueva industria en la intersección de la gestión de crisis de las actividades publicitarias e informativas, el análisis de la opinión pública y la seguridad en línea.

La expansión de la industria de los medios sociales para protegerse de contenidos peligrosos se produce casi a diario. Esto se debe principalmente al rápido desarrollo de la propia Internet, al aumento significativo de la cantidad de contenidos publicados por los usuarios y al paso de muchas empresas nuevas de la actividad en los medios sociales fuera de línea a la actividad en línea. Además, plataformas en línea como el casino Kartáč están cada vez más atentas a la supervisión y regulación de las interacciones de los usuarios para garantizar un entorno seguro. Con la transición de las empresas a los espacios digitales, la responsabilidad de salvaguardar a los usuarios de contenidos nocivos se ha convertido en una prioridad fundamental.

Las estadísticas citadas por Hemanshu Nigam, antiguo jefe de seguridad de MySpace, sugieren que entre 250.000 y 300.000 personas en todo el mundo se dedican hoy a la vigilancia de las redes sociales. Alrededor de un millón de empleados más son responsables de proteger la información personal y la seguridad en línea. Hemanshu Nigam también señala que la información de estas estadísticas es conservadora y cambia constantemente.

¿Qué hacen los guardianes de Internet?

Emma Monks es directora de moderación y seguridad en Crisp Thinking, con sede en Leeds (Reino Unido). Los guardianes de las redes sociales de hoy en día, dice, son descendientes directos de aquellos moderadores que fueron pioneros en las redes sociales y sirvieron tanto de editores como de propietarios de la comunidad.

La empresa, dirigida por Emma Monks, está representada por los principales expertos del sector de la protección de riesgos en las redes sociales. Según la propia Emma, este trabajo solía ser realizado en su mayoría por voluntarios de forma voluntaria. Era una especie de pasatiempo, y los miembros de la comunidad de moderadores podían tomar decisiones sobre la eliminación o no de determinados contenidos, basándose únicamente en sus propias opiniones.

Ahora hay profesionales más que aficionados en el campo de la moderación de las redes sociales. Crisp interactúa con sofisticados algoritmos informáticos que buscan contenidos potencialmente inapropiados y peligrosos.
El equipo de análisis y evaluación de riesgos de las redes sociales de Crisp rastrea cada día los sitios web y las páginas de las redes sociales de empresas populares en busca de contenidos peligrosos que contengan información ilegal.

Guardianes de las redes sociales

Limpiadores virtuales

Los limpiadores virtuales, o gestores de contenidos, se basan en el principio de que la presencia de los consumidores y de las marcas en los medios sociales debe estar libre de problemas. Según el director ejecutivo de Crisp, Adam Hildreth, el cumplimiento es importante ante todo para las propias empresas y les ayuda a evitar muchos problemas. Si la seguridad fuera de línea está garantizada por la policía, la función de seguridad en línea está a cargo de las fuerzas del orden de Crisp Internet.

La empresa, dirigida por Emma Monks, está representada por destacados expertos en el sector de la protección frente a los riesgos de las redes sociales. Según la propia Emma, antes este trabajo lo realizaban sobre todo voluntarios de forma voluntaria. Era una especie de hobby, y los miembros de la comunidad de moderadores podían tomar decisiones sobre si eliminar o no determinados contenidos, basándose únicamente en sus propias opiniones. Con el tiempo, sin embargo, el panorama ha cambiado radicalmente. Con el auge de las plataformas en línea y la creciente prevalencia de las redes sociales, la necesidad de una supervisión profesional se ha vuelto más crítica. Empresas como Uniclub, un casino en línea, también han reconocido la importancia de mantener una presencia en línea positiva, lo que pone de relieve la mayor aplicabilidad de estas competencias. Hoy en día, el trabajo está más estructurado y regulado, con directrices y normas exhaustivas para garantizar la coherencia y la imparcialidad. La experiencia de estos profesionales es ahora indispensable para gestionar la reputación en línea y mitigar los riesgos asociados a los contenidos generados por los usuarios. Este cambio refleja un reconocimiento cada vez mayor de las complejidades que entraña la moderación de los espacios en línea y el valor de los conocimientos especializados en este campo.

A lo largo de los años, Crisp ha ampliado considerablemente su alcance. En la actualidad, la empresa vigila las redes sociales en busca de problemas y amenazas, desde voluntarios agresivos que publican amenazas en los sitios web de los fabricantes de prendas de piel hasta amenazas de bomba en aviones o aeropuertos publicadas en la página de Facebook de una compañía aérea.

Adam Hildreth afirma que la base de clientes de su empresa incluye unas 200 marcas internacionales, y que sus contenidos multimillonarios son revisados por 200 analistas profesionales cada mes. Cuando surgen riesgos o se publican contenidos inapropiados, ellos mismos corrigen el problema (eliminando la publicación de la página de la marca, por ejemplo).

Los analistas de contenidos de las redes sociales de Crisp están formados profesionalmente para identificar los distintos tipos de riesgos (incluido el riesgo de reputación debido a la publicidad negativa o la seguridad de los usuarios debido a los riesgos de represalias físicas).

Una vez identificado el riesgo, aplican estos criterios al contenido, clasificándolo en diferentes tipos de amenazas. La lista de tareas de los analistas de Crisp también incluye notificar a los clientes sobre los riesgos emergentes y tomar medidas exhaustivas para eliminar los contenidos no solicitados (borrado, denuncia de la información ilegal a los administradores de la red o a las fuerzas del orden).

Experiencia no necesaria

Emma Monks señala que la experiencia no es necesaria para el análisis de los medios sociales. Las personas que solicitan el puesto sólo tienen que ser observadoras y ser capaces de identificar rápidamente los distintos tipos de riesgos y aplicarlos de forma coherente a los contenidos publicados en las redes sociales. La coherencia, según Monks, es lo que garantiza una experiencia de alta calidad para el cliente, además de contribuir a un entorno online sano y seguro.

El analista de redes sociales debe ser imparcial, objetivo y resistente al estrés, ya que el contenido puede incluir pornografía infantil, desmembramiento de cuerpos humanos y otras informaciones impactantes. El optimismo y la capacidad de comunicación también son útiles en el trabajo de análisis.

Muchas empresas modernas necesitan una protección de calidad frente a los riesgos de las redes sociales. Es sencillamente imposible existir en el espacio online actual sin esa protección», afirma Hemanshu Nigam.